Son los espetinhos –así escritos de esta manera- una suerte de anticuchos de trocitos de res, sazonados finamente con sal y algunos pocos condimentos, que gracias al calor de la parrilla tornan su color de carne fresca en jugosos trozos que gotean sabor y personalidad definida.
Nacen en Brasil, con la costumbre de utilizar espadas para la presentación de carnes diversas en los banquetes opulentos donde había variedades de ellas. Cerdo, res, pescado, en sus diversos cortes eran exhibidos y cortados finamente para su repartición en los ansiosos platos de los invitados.
Los espetos o espadas, brindan su nombre a estos deliciosos bocados. A los que se les añade la terminación “inho” o iño” para mencionar la palabra de una manera más familiar, una costumbre brasileña, por donde se le mire.
A modo de imitación de las espadas, se utilizan los conocidos palitos de caña para ensartar los trozos de carne o de lo que desee cocerse a la parrilla. Esta costumbre popularizó su consumo y se extendió por el resto de América.
Aquí en Lima, la Comercializadora de Carne Agrocomercial Progreso, Aycha, ofrece al paso, estos espetiños como una forma de mostrar el tipo y las variedades de carnes que expenden en sus diferentes locales.
Los pinchos, como bien se les conoce en España, Colombia o Ecuador, yakitoris en Japón o brochetas en nuestro medio, tienen la sencillez de cualquier tapa o bocado y para su elaboración no se requiere de muchos elementos. Por ello su practicidad y delicia los convierte en los favoritos de las parrillas brasileñas, donde son convidados obligados y gratuitos.
AYCHA EN LIMA
Cuando el hambre agobia y el tiempo presiona, no hay mucho más que hacer que buscar algo que comer que aplaque en algo ese deseo.
La marca Espetiños está en Lima desde hace casi cuatro años. Llegó de la mano de la empresa Agrocomercial Progreso, la cual ya tiene cuatro locales distribuidos en la capital, Lima Cercado y Callao.
Los Espetiños de Aycha, son brochetas de 50 gramos de carne de res, pollo, cerdo o corazón y en el caso del chorizo con un peso de 100 gramos. Los mismos que son procesados bajo estrictas medidas de seguridad e higiene, para luego ser preparados a la parrilla con una receta estandarizada que hace que todos los espetiños tengan un sabor ideal.
La gran diferencia entre los espetiños y los anticuchos peruanos, es el aderezo. El aderezo de los espetiños no lleva demasiados condimentos, solo los justos y necesarios para que el sabor de carne a la parrilla no se vea opacado por otros sabores.
La empresa vende diariamente un promedio de tres mil espetiños al día en cada local. Los directivos de Aycha, al ver el éxito de esta propuesta, apostaron por ampliar el módulo de atención y los puntos de venta, expandiéndose en Lima en los locales de: Jr. Huallaga 601, Lima; Jr. Ayacucho 737, Lima; donde pueden encontrar una forma sencilla y económica de aplacar sus antojos.