Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada 30 segundos se diagnostica un cáncer de mama, en algún lugar del mundo. En el Perú, es la primera causa de cáncer en mujeres y la cuarta de mortalidad. Según estudios médicos, su incidencia es 12.4 casos por cada 100,000 habitantes, una cifra que ha aumentado de forma considerable en los últimos años.
Es preciso indicar que el cáncer de mama es una enfermedad que no distingue edades, aunque solo un seis por ciento de los casos se da en menores de 35 años. Los factores de riesgo de mayor frecuencia son los genéticos, la edad, los antecedentes gestacionales, los antecedentes de salud, los antecedentes de desarrollo sexual y el estilo de vida, principalmente en el consumo de alcohol y tabaco.
Según los especialistas, muchos de los casos de cáncer de mama son asintomáticos y solo puede evidenciarse la enfermedad con la mamografía o ecografía de mama, por ello, es importante que se realicen chequeos médicos continuos. En el caso de las mujeres menores de 40 años, pueden realizarse ecografías, y a partir de esa edad, mamografías.
Las nuevas tecnologías permiten realizar chequeos completos de mama en pocas horas. Es importante que todas las mujeres sepan que cuanto más temprano se realiza un diagnóstico más posibilidades habrá de erradicar la enfermad del cuerpo. La ciencia ha avanzado rápidamente en la lucha contra este mal y lo que antes podía considerarse como una enfermedad con pena de muerte, hoy puede eliminarse si se detecta a tiempo.
EN BUSCA DE VACUNAS
Efectivamente, la ciencia está en constante búsqueda de vacunas y remedios que puedan acabar con el cáncer de mama. En Estados Unidos, científicos del Instituto de Investigación Lerner, de la Clínica Cleveland (Ohio), dicen haber encontrado una vacuna que podría inmunizar al cuerpo humano en el desarrollo de tumores de mama.
Sus estudios, realizados en roedores, arrojaron interesantes datos. Una única dosis de la inmunización evitó el desarrollo de tumores y al mismo tiempo inhibió el crecimiento de los tumores ya existentes. Ahora planean realizar los ensayos clínicos de la vacuna en seres humanos.
"Creemos que esta vacuna algún día será utilizada para prevenir el cáncer de mama en mujeres adultas de la misma forma como las vacunas previenen la poliomielitis y el sarampión", expresó a un medio local el profesor Vincent Tuohy, quien dirigió el estudio.
La vacuna está compuesta de un antígeno (sustancia que provoca la formación de anticuerpos) llamado a-lactalbumin, y ataca a la propia enfermedad, a diferencia de las vacunas preventivas contra el cáncer cervical y hepático que atacan al virus que las genera.
Sin embargo, habrá que esperar aún algunos años para que esta vacuna esté completamente probada y disponible a la venta. Por el momento habrá que centrarnos en la prevención y detección temprana. Una vida saludable, con deporte, sin alcohol ni tabaco puede reducir considerablemente el riesgo de padecer cáncer, junto con una visita anual al médico para los exámenes de rigor.