Martes 23 de abril 2024 | Contáctenos
“Quiero luchar por una vida más digna para todos los peruanos, luchar por un Perú más justo, más equitativo”. Con estas palabras, el ex presidente Alejandro Toledo Manrique abrió su discurso en el que anunció oficialmente su candidatura a la Presidencia de la República.
Aunque era algo que se veía venir, Toledo se cuidó de lanzar candidaturas prematuras y se dedicó a responder con evasivas cada vez que alguien le consultaba al respecto. Pero el miércoles 10 de noviembre fue el día escogido para anunciar su intención de repetir el plato en el sillón de Pizarro.
Y es que obviamente tanto él como su entorno se han dado cuenta de que las posibilidades de volver a ser presidente del Perú no le son tan esquivas. A decir de distintos sondeos de opinión, la intención de voto a favor del líder de Perú Posible se ha venido incrementando a paso lento pero seguro, al punto de ubicarse en el tercer lugar en las últimas encuestas, relegando al cuarto lugar a Ollanta Humala del Partido Nacionalista, quien, conforme pasa el tiempo, se va desinflando lentamente.
Cabe mencionar que si bien Keiko Fujimori y el ex alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, lideran los dos primeros lugares en las encuestas, es evidente que los porcentajes que ostentan poco se mueven desde hace meses, lo que nos lleva a pensar que ya alcanzaron su “techo”, lo cual podría beneficiar a Toledo, quien todavía tiene posibilidades de seguir creciendo, más aún ahora que ya lanzó oficialmente su pretensión.
En cuanto a la candidatura de Mercedes Aráoz -en representación del partido de gobierno-, no se puede negar que su incursión en el escenario político cambia ligeramente el panorama electoral que ya se estaba perfilando.
La agraciada ex ministra de Economía y de Comercio Exterior y Turismo puede acaparar los votos de los electores que vean en esta mujer profesional, exitosa, con experiencia y sin militancia política, la mejor de las opciones. Es tan mujer como Keiko, más carismática que Castañeda y tan preparada como Toledo, los tres candidatos con más opciones -en este momento- de pasar a segunda vuelta.
Pero volviendo a Toledo, no faltarán los detractores que saquen a relucir las perlas de su mandato como los gastos desmedidos y la corrupción que salpicó a Palacio de Gobierno durante su gestión.
