Ollanta Humala Tasso y sus hermanos

Un candidato que hasta hace pocas semanas ocupaba el cuarto lugar en los sondeos de opinión, hoy tiene seguro su pase a la segunda vuelta: Ollanta Humala Tasso. El aspirante a la Presidencia de la República que recibe una pensión mensual de S/. 2,870 en calidad de militar en situación en retiro y que se jacta de ser de clase media, hoy se cuida de lucir su lujoso reloj de la exclusiva marca suiza TAG Heuer, valorizado en US$ 3,800 (más de S/. 12,000).

Además, evita responder sobre los vínculos de su esposa con dineros provenientes del mismísimo gobierno chavista: Operadora Canal de Noticias, que pagó suculentas cifras de dinero a Nadine Heredia por concepto de “asesorías”, recibió poco más de un millón de dólares del gobierno del venezolano Hugo Chávez, que fueron utilizados para pagar los “honorarios” de la mujer de Humala.

En el último debate presidencial organizado por Transparencia, Humala brindó un triste espectáculo al dedicarse enteramente a leer su libreto sin salirse del guión y sin dignarse a responder las preguntas que le formularon.

Le preguntaron si era cierto que pensaba cambiar la Constitución, pero no contestó. Le preguntaron si planeaba iniciar un programa de estatizaciones y aumentar los impuestos. Tampoco contestó. Le preguntaron si pensaba revisar los contratos y los TLC. No hubo respuesta.

Humala intentó mostrarse menos radical moderando su discurso extremista. Ahora luce saco y corbata, dejando de lado su polo rojo del 2006, el color con el que se identifica a Hugo Chávez.

Pero no a todos convence el cambio de un personaje que antes posaba ante las cámaras saludando a sus amigos Chávez y Evo Morales, y que hoy se hace el desentendido y busca marcar distancia de ellos para ganar la Presidencia del Perú.

Uno de los que no cree en el cambio de Ollanta es su propio hermano Ulises, quien en declaraciones a un medio local, afirmó que de llegar a Palacio de Gobierno, Humala buscaría perpetuarse en el poder, para lo cual no tendría ningún inconveniente en cerrar el Congreso e instaurar una nueva Constitución.

“Ollanta y sus candidatos, que hoy aparecen como moderados, solo se han disfrazado por táctica electoral (...) Él gobernaría como Hugo Chávez", alertó Ulises Humala en declaraciones al periodista Piero Llamo.

“Este es un proyecto chavista. Y para solventar socialmente los cambios, caería en un populismo barato. Ollanta se ha presentado como moderado, pero es el mismo del 2006", advirtió sin medias tintas.

Ulises incluso dijo que su hermano se cree una especie de Mesías, se siente predestinado para instaurar el modelo chavista en el Perú. "Para la izquierda comunista, la democracia no existe; lo que hay es lucha de clases. Ollanta y quienes lo acompañan creen en eso. Ellos no tendrían límites, porque creen que la nación es más importante que el individuo”. En ese contexto, hizo hincapié en que si ganara Humala, “tendremos una dictadura para rato".

"Estoy convencido de que si ellos llegan al poder, los vamos a tener que sacar como los libios al dictador Gadafi. Y lo harán nuestros hijos, porque esta es una dictadura para años. Si Chávez viviera hasta los 80 años, se quedaría en el poder hasta esa edad, y Ollanta también", comentó.

Y su otro hermano, Antauro, tampoco lo deja bien parado. Según afirmó, Ollanta estuvo detrás y dirigió desde lejos el levantamiento armado denominado “Andahuaylazo” ocurrido en el 2005, en el que fallecieron cuatro policías.

La justicia peruana archivó la denuncia presentada contra Ollanta Humala por la toma de la comisaría en Andahuaylas que lideró su hermano Antauro, pese a que lo respaldó públicamente.

“Hago un llamamiento al pueblo peruano: la lucha para rescatar nuestra democracia pasa necesariamente por desconocer al señor Alejandro Toledo (entonces presidente de la República) y recuperar nuestra soberanía popular que nos ha sido robada. Por tanto, es momento de levantarnos y demostrar al Gobierno y a la casta política antipatriota que el pueblo peruano es capaz de asumir una actitud viril cuando es estafado por un gobierno (...) La insurgencia popular en este caso es un deber y así lo demando. A la ciudadanía los insto a participar activamente en nuestro destino nacional mediante la realización de marchas y movilizaciones demandando la salida de Alejandro Toledo de la Presidencia de la República”. Palabras del pronunciamiento emitido por Ollanta Humala el 1 de enero del 2005, en apoyo al levantamiento de su hermano Antauro, aunque ahora diga lo contrario y trate de tapar el sol con un dedo.