Nicholas Crace, un ciudadano británico de 83 años de edad, no solo es elogiado por haber donado sangre en 57 oportunidades, sino además por ser el donante vivo de riñón más viejo de la historia, lo que ha causado admiración por parte de los científicos.
Así lo informó el Servicio Británico Nacional de Salud, entidad a la que fue el órgano concedido, que recordó además que Crace fue antes director de la organización benéfica del condado de Hampshire.
De acuerdo a la BBC, esta persona ya tenía decidido hacer donaciones luego que su esposa falleciera años atrás.
Según los doctores que lo atendieron, el riñón funcionaba tan bien como el de un hombre de 40 años, razón por la que optaron por utilizarlo en beneficio de una persona, cuya identidad quedó en el anonimato.
En Gran Bretaña, cerca de 7 mil británicos esperan un riñón para su trasplante, y casi 300 fallecen de forma anual esperando uno.