Comer fresas durante todo el año puede prevenir ataques cardíacos, según sugiere un estudio.
Los científicos encontraron que tres o más puñados de fresas o arándanos a la semana reduce el riesgo de ataque al corazón en las mujeres hasta en un tercio.
Ambas frutas contienen compuestos flavonoides de plantas que parecen combatir las arterias bloqueadas, dicen los investigadores.
El estudio incluyó a 93.600 participantes en el Nurses 'Health Study II', una importante investigación de EE.UU. de la salud de la mujer.