Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
Comenzó la gran cuenta regresiva hacia los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016. A escasos 365 días de la mayor competencia olímpica del planeta, las obras ya entran a su etapa final. Sin lugar a dudas, un gran estímulo para la intensificación de las acciones de promoción internacional.
Uno de los aspectos más importantes de la preparación del país, es que espacios como la Villa de los Atletas ya se encuentran en su fase final de construcción. Esta gran obra incluye 3604 departamentos divididos en 31 edificios y 7 condominios. El gigantesco proyecto tendrá capacidad para albergar 17 950 personas, entre atletas y miembros de la comisión técnica. Claramente, un gran legado amparado en conceptos sustentables, que además albergará un parque con especies nativas de árboles, áreas de descanso, ciclo vías y pistas de caminata.
El Parque Olímpico, otra de las grandes obras, viene recibiendo elogios por parte del Comité Olímpico. La construcción, además de su utilidad durante la competición, contempla importantes proyectos con fines públicos a futuro. Aquí se destaca además la transformación de estos espacios en escuelas públicas, centros de entrenamiento deportivo y áreas de esparcimiento. Por ejemplo, el estadio Acuático Olímpico se trasformará en dos centros acuáticos disponibles para la población mientras que la pista de canotaje slalom en un futuro se convertirá en un lago recreativo abierto al público. Cabe señalar, que estas obras, que alcanzan un presupuesto de 11 mil millones de dólares, se transformarán en sueños sustentables; pues del total de dicha cantidad, 7 mil millones de dólares forman parte de los esfuerzos destinados a obras que quedarán para la población, cuya inversión proviene de alianzas público-privadas.
Sin lugar a dudas, un esfuerzo necesario también para recibir de la mejor manera a los miles de visitantes, deportistas y autoridades de las delegaciones provenientes de más de 200 países. Referente al número de turistas extranjeros, según el Ministerio de Turismo, se espera que más de 300 mil extranjeros visiten el país. La mayoría de ellos permanecerían en Río de Janeiro, sede de la competencia. Sin embargo, otros destinos también se preparan para recibir atletas y sus delegaciones: Manaos, Brasília, Salvador, Belo Horizonte y São Paulo. Por ejemplo, Belo Horizonte recibirá en sus centros profesionales de atletismo, natación y gimnasia artística, delegaciones de Gran Bretaña, Canadá e Irlanda, respectivamente. En Río de Janeiro, por su parte, entre julio y octubre de este año, se realizarán eventos de prueba y preparación para los Juegos Olímpicos, incluyendo remo, equitación, ciclismo de ruta y maratones acuáticos.
"En la condición de anfitrión de ese megaevento, venimos desarrollando actividades estratégicas para seguir incrementando el número de visitantes internacionales por todo el país. Río de Janeiro será la puerta de entrada, pero tenemos plena seguridad de que turistas del mundo entero visitarán diversas ciudades brasileñas durante los Juegos", señaló Vinicius Lummertz, Presidente de Embratur (Instituto Brasileño de Turismo).
En este contexto y con el fin de presentar la preparación de Brasil para el próximo evento deportivo, Embratur trabaja intensamente en avances en la promoción del país con miras a la competición. El Instituto dio inicio a un intenso año que se centra en la implementación de acciones promocionales de Brasil en un trabajo conjunto con los principales representantes del sector turístico. La idea es dar una especial atención a América del Sur, intentando repetir la expectativa alcanzada en la última Copa del Mundo; por ello se realizarán visitas de motivación a los principales mercados del continente.
Lógicamente, los esfuerzos también contemplan un refuerzo en toda la estrategia de seguridad pública. Ya se encuentra en marcha el más importante plan de seguridad de la historia del Brasil. Un proyecto que contempla el desplazamiento de más de 85 mil efectivos, siendo 47 mil miembros de seguridad y de Defensa Civil y 38 mil miembros de las Fuerza Armadas. El proyecto también incluye un Centro Nacional en Brasilia y Centros en cada una de las cuatro regiones de competición (Barra, Copacabana, Deodoro y Maracaná) y espacios en cada instalación deportiva. Adicionalmente, serán creadas unidades específicas, como el Centro de Inteligencia para Servicios Extranjeros y el Centro de Inteligencia de Combate al Terrorismo.
Por su parte, el Centro Integrado de Operación Conjunta de Salud (CIOCS) será instalado en este mes, durante los eventos de prueba. Como en el Mundial 2014, esta experiencia fue determinante para el monitoreo de informaciones en los estados y municipios y la organización de la red de asistencia a la salud. El CIOCS monitorea las situaciones de riesgo, la demanda de atención y vigilancia sanitaria dando respuestas coordinadas con las secretarías de salud locales.
Toda esta preparación ya se vive en Río de Janeiro. La ciudad ahora es protagonista de una serie de festividades que iniciaron el último sábado 1 de agosto, las cuales incluyen pruebas deportivas, una deslumbrante celebración para conmemorar el año con miras a los Juegos y un concierto con tres de los principales artistas de la música brasileña. Todo estará coronado por una maratón cultural organizada por la Prefectura de Río.
Sin lugar a dudas, Río de Janeiro será la puerta de entrada para que los extranjeros conozcan Brasil. Los sudamericanos fueron los principales visitantes de la Copa del Mundo, lo que crea una expectativa similar a la de 2016. La idea es repetir las cifras del año 2014 donde, según pesquisas de opinión desarrolladas por el Ministerio de Turismo, del total de visitantes en 2014, el 95,3% manifestaron su interés por regresar al país y 90.8% destacó positivamente la organización de modo general.
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