Del 01 al 07 de agosto se conmemora a nivel internacional la ‘Semana de la Lactancia Materna’, una fecha fomentada desde 1990 por la Organización Mundial de Salud (OMS) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) con el fin de promover, proteger y respaldar la lactancia natural.
El Perú no ha sido ajeno a esta fecha. Sin embargo, en el entorno social y familiar, aún existe mucho desconocimiento respecto a la importancia de la correcta alimentación y los cuidados que debe tener una mujer, si se encuentra dando de lactar. El doctor Arnaldo Hurtado, médico nutriólogo de Laive, explica que “la madre debe estar bien alimentada para que la producción de su leche sea la óptima en cuanto a calidad. La leche materna contiene vitaminas, minerales, proteínas, inmunoglobulinas (lg A) únicas que empiezan a formar el sistema inmunológico del recién nacido; además de grasa, la cual es muy importante para que el bebé gane peso en esta primera etapa de su vida”.
Pero, ¿por qué es tan trascendental la alimentación de la progenitora? El especialista en medicina nutricional detalla que “lo es para evitar cualquier carencia nutricional en su leche; así como para impedir adquiera carencias propias que le pudieran impedir dar de lactar”.
Por este motivo, el médico nutriólogo asesor de Laive brinda cuatro (04) consejos que toda mamá debe considerar como básicos durante el periodo de lactancia:
PARA TENER EN CUENTA
Adicionalmente, el médico nutriólogo asesor de Laive detalla tres (03) tips que debes saber sobre la alimentación del recién nacido:
ü La leche materna es el único alimento del bebé hasta los 6 meses de edad, aproximadamente. Es posible extenderlo hasta el primer año.
ü Bajo ninguna circunstancia se le debe dar leche fresca o de cualquier mamífero a un recién nacido o bebé; por lo menos, hasta el año de edad. Se debe utilizar leche maternizada o de fórmula. Recién a partir del año de edad es factible incluir leche fresca o de cualquier tipo.
ü Algunos de los beneficios, a largo plazo, asociados la lactancia materna son: tener una menor incidencia de diabetes, caries dental y desarrollo de alergias. De otro lado, mejora el nivel de flora intestinal y desarrollo de defensas, así como la formación dental y el desarrollo cognitivo.