Un reciente estudio señala que el Perú es “la peor capital para manejar en América Latina”, por los estilos de conducción agresivos y exceso de tráfico. Todo ello provoca un stress adicional que muchas veces produce mal humor, dolores de cabeza, entre otros; por ello, Gonzalo Rodríguez, Jefe de Marketing y Ventas Faw, primera empresa automotriz de China, brinda las siguientes recomendaciones para manejar y llegar a su destino con el menor stress posible:
- Más temprano, menos stress.- Iniciar bien el día laboral es importante y positivo para nuestro estado de ánimo y producción en el trabajo. Si sabemos que saliendo de casa a las 7:30 a.m. encontraremos las vías con mayor tráfico por ende mayores probabilidades de estar expuestos a un accidente de tránsito o malhumor por la congestión, se recomienda salir de 10 a 15 minutos antes de lo habitual para evitar ese caos vehicular.
- Más rápido no significa llegar a tiempo.- Conducir más rápido no garantiza llegar antes a tu destino. Por el contrario, lo que se logra es cubrir la misma distancia, en el mismo tiempo, y generando un mayor desgaste de los frenos, de llantas, y mayor consumo de gasolina. Sin contar, que acabamos agotados emocionalmente por estar en un estado de alerta contínua. Ir a una velocidad continua permitirá una conducción más relajada y un ahorro considerable de combustible.
- Mejor con música.- Ya conocemos el tiempo promedio que toma manejar hasta nuestro centro de trabajo mientras manejamos. Por ello recomendamos, prepara diferentes “set list” con aquellas canciones que sean de nuestro agrado, inclusive si se anima puede cantar algunas de las canciones mientras maneja, eso sí sin descuidar la atención en la vía ni en los demás autos. Escuchar nuestras melodías favoritas nos permitirá sobrellevar el tráfico de mejor manera y nos relajará.
- Ten en cuenta el efecto multiplicador.- Si un conductor maneja de forma agresiva, puede que en su trayecto haya generado un fastidio a otros cinco conductores y ellos, a su vez harán lo mismo. Multipliquemos lo bueno, no lo malo. Combatamos el manejo agresivo con un estilo de manejo relajado, considerado y pensando en el otro. De esta manera, haremos algo que no se esperan: responder con amabilidad ante su agresividad. Así, multiplicaremos el buen estilo a otros. Inclusive hacerlo, a nivel personal, nos brinda satisfacción.
- Conducir bien es conducir con fluidez. Si a partir de mañana todos nos los conductores decidiéramos respetar a los demás, anticipando nuestras maniobras y las reglas de tránsito, conduciendo de forma más sosegada terminaríamos con vías menos congestionadas, menos accidentes y menos gasto en combustible y recambios.
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