Según el INEI, en el 2014, del total de mujeres de 15 a 19 años de edad con educación primaria, el 29,3% ya eran madres. Además, el porcentaje de embarazadas de 15 años de edad se incrementó de 1,0% a 1,9%; en las de 16 años aumentó de 4,7% a 5,4%; y en las de mayor edad pasó de 22,3% a 26,7%.
¿Cómo revertir las cifras y prevenir los embarazos en adolescentes? La especialista Cinthya Sifuentes, coordinadora de obstetricia del Complejo Hospitalario Alberto Barton Thompson, recomienda que lo más importante es la comunicación y la correcta información que los jóvenes reciben de sus padres.
“La prevención comienza antes de que lleguen a la adolescencia. La comunicación fluida y constante entre padres e hijos es el punto clave para cuidar la salud sexual de los jóvenes, para asegurarse de que estén bien informados sobre el sexo y los métodos anticonceptivos. No se recomienda utilizar técnicas de temor como una manera de impedir que el adolescente tenga relaciones sexuales”, señala la Dra. Sifuentes.
En lo que va del año, el hospital Alberto Barton ha registrado 76 partos de menores de 19 años, cifra mayor a la del 2015, cuando se registraron 58 partos. Estos embarazos suponen riesgos en mamá y bebé: “Para la mujer, los riegos emocionales conllevan problemas de autoestima y frustraciones personales y sociales. En el aspecto físico se presenta la detención del crecimiento, ya que las proteínas para la madre ahora se tienen que compartir con el hijo. Además, la madre tiene alto riesgo de desarrollar anemia y sufrir desnutrición e hipertensión en el embarazo. Por su parte, el bebé puede nacer prematuramente y con bajo peso, lo que influye en el desarrollo de más enfermedades infecciosas”.
El área de planificación familiar del Policlínico Alberto Barton desarrolla estrategias enfocadas a salud sexual y reproductiva y brinda servicios a las aseguradas como consejería, guía en uso de anticonceptivos, además de charlas a padres con hijos adolescentes.