Tras más de dos décadas de investigación científicos de la Universidad de de Pennsylvania, en EE UU, informaron que encontraron el origen de la alopecia androgénica y auguraron una cura en los próximos años.
Según los expertos, lo que se conocía de la alopecia androgénica, la forma más común de calvicie, era que las personas que sufrían este problema tenían menos células madre en su cuero cabelludo, lo que determinaba la pérdida del pelo.
Sin embargo, los científicos han descubierto que las personas calvas tienen igual cantidad de células madre en el cuero cabelludo que las personas que tienen una cabellera normal.
El problema está en otras células, llamadas progenitoras del pelo, ubicadas en el folículo piloso y que participan en la generación de los cabellos. Quienes sufren alopecia tiene una menor cantidad de ellas. “Estas células son fundamentales, porque son las que permiten que el cabello pueda regenerarse cuando cumple su ciclo de vida”, señaló Brian Cotsarelis, autor principal del estudio publicado en la revista Journal of Clinical Investigation.
“Con este descubrimiento se podría encontrar nuevos tratamientos para beneficio de millones de personas”, señaló Cotsarelis.