Alejandro Sanz en Lima

Su último disco se titula Paraíso Express y con ese nombre ha vuelto después de dos años al Perú. Un artista consagrado con más de 20 años de carrera musical y 25 millones de discos vendidos en todo el mundo, busca retomar con esta producción su amor por el pop y ganarse a un público más juvenil.

Alejandro Sánchez Pizarro nació hace 42 años en Cádiz, España. Amante de la música y los ritmos flamencos desde muy niño, evidenció su pasión por el arte desde los ocho años. Es uno de los cantantes españoles con más éxito y fue el primero en grabar un Unplugged para la cadena televisiva MTV y abrir una noche de gala de los MTV Music Awards.

Rompió las barreras de su país con un estilo diferente, él propuso una balada romántica pero no absurda, llena de emotividad pero con una fuerte dosis de energía vital... Una oferta que en un inicio no parecía cuajar en el gusto de los jóvenes. Su interpretación entre cantada y hablada se convertía en una arriesgada manera de acercarse al público femenino. Un susurro confuso que trataba de calar en la intimidad de sus escuchas.

Con el correr de los años, Alejandro Sanz impuso el original manejo de su voz y tesitura, armonías y cadencias graves que se desplegaron en un sinnúmero de canciones que batieron todos los records en los rankings musicales. Con 12 discos en su haber es un consagrado de la balada pop en toda la Latinoamérica, España y Estados Unidos.

Su disco más destacado en lo que va de su larga carrera musical es su cuarto álbum, llamado 3. En él se encuentran temas como La fuerza del corazón, ¿Lo ves?, Quiero morir en tu veneno, Eres mía y Mi soledad y yo. Con esta producción, Alejandro Sanz logró colocar cinco canciones en los top más rankeados en el mismo año, un hito en la historia de la discografía en español.

Con Paraíso Express viene el single principal Looking for paradise cantado a dúo con la talentosísima cantante de R&B Alicia Keys, una mezcla de español e inglés que confluyen en una pegajosa melodía a punto de guitarra, como le gusta a Alejandro Sanz. Una canción animosa que retoma la energía positiva y entusiasta de un hombre que más allá de ser un artista, es una persona como cualquier otra que ha aprendido a superar los embates que él mismo ha generado.

En el 2004, Alejandro Sanz se divorció de su esposa, la modelo mexicana Jaydy Michel, a pesar de tener en ese entonces a su pequeña hija de tres años, Manuela. Sus vidas quedaron separadas, sin saber que en el 2006 enfrentarían un escándalo que obligó al cantante a enfrentar a la prensa internacional, confesando que en el 2002 tuvo un hijo llamado Alexander, producto de una relación extramarital con la diseñadora de modas Valeria Rivera, una guapa puertorriqueña con la que habría sido infiel a la madre de su hija.

Es muy difícil, seguramente, manejar la fama y el éxito que ha cosechado Sanz en todo el mundo. Lugar donde presenta su Paraíso Express se abarrota de fanáticas que saben de memoria y corazón sus canciones. El 8 de setiembre se abrió la venta de entradas para su concierto en Lima, y ha sido, como era de presagiar, un gol en ventas.

Acompañado de una banda de ocho músicos, el show que presentará en nuestro país es parte de una extensa gira internacional que ha recorrido ya Buenos Aires, España, México y Nueva York, entre otros países, con multitudinarias presentaciones.

Perú lo espera para disfrutar con él y recordar, porque el público no perdona que no cante sus éxitos anteriores, canciones que llegaron al alma de quienes lo siguen. Así como los temas que ha grabado en compañía de otros renombrados artistas como Joaquín Sabina, Shakira, Lena, Juanes, Carlos Baute, entre otros.

En dos ocasiones fue ganador del Grammy al Mejor Álbum Latino y 15 veces se llevó a casa el Grammy Latino.

Aunque acostumbrado a ser el número uno, Alejandro Sanz guarda la sencillez en la mirada, y la esperanza, con mucha humildad, de poder seguir conectándose con su público, a pesar de los años. Este 23 de octubre la explanada del Estadio Monumental vibrará con el español que más suspiros y admiración inspira por una carrera impecable, plagada de talento y respeto por la calidad de su música.