Los meses de espera valieron la pena. Lady Gaga volvió y a lo grande a los charts internacionales con la publicación de su nuevo disco, Born this way que, según los cálculos, podría convertirse en el más vendido del año.
Se trata del tercer álbum de la cantante estadounidense en menos de cuatro años y su apuesta más grande en cuanto a fusiones y a vanguardismo electro-pop y que la convierte en la artista más arriesgada de la industria, lejos, muy lejos de otras féminas como Katy Perry o Rihanna.
Gaga dice que su nuevo trabajo será el mejor de la década y no admite dudas al respecto a los periodistas que creen que es otra más de sus extravagancias. “Se ríen pero lo confirmarán con el tiempo”, dijo en una entrevista a una radio alemana.
Y es que la artista en esta ocasión ha dejado de soñar con la fama, como en su primer disco, o coquetear con el glamour, como en el segundo, sino que se ha comprometido con el mensaje de su música. Como dijo un periodista especializado en Colombia, “Gaga está enamorada de su grandeza y, por lo tanto, cree que puede cambiar el mundo”.
Así, la neoyorkina de apenas 26 años apela a verdaderos cantos a la individualidad, la independencia y la libertad sexual, todos, claro está, en onda dance. Gaga quiere salvar al mundo con el baile y no, como cree Britney, “porque se va a acabar”.
Pero su música, que puede llegar a tener un profundo compromiso social en el tema Americano –con toques de mariachi– se muestra vulnerable a nivel personal con The edge of glory, que escribió a su abuelo, quien murió recientemente.
Hasta ahora, el disco ha convencido a su fanaticada que cree que Gaga es más que una pose o un traje estrambótico. Si alguien dijo que la payasada tenía un límite, por lo menos, con la cantante todavía no llega.
Sea con el cabello negro, rubio, de geisha futurista, de alien, de María Magdalena, extremadamente delgada, desnuda, tapada, todo es novedad en Gaga que más que una payasa ha sido encumbrada como un ícono de la moda.
Desde el primer día, su disquera puso manos a la obra un plan de marketing novedoso para colocar el álbum en lugares no antes visto de difusión como Facebook, Twiiter y otros sitios de Internet.
El resultado ha sido extraordinario. A una semana se haberse lanzado al mercado ya se han vendido un millón de copias solo en Estados Unidos y Canadá.
El pasado lunes el disco colapsó la página web de Amazon que lanzó una oferta por 24 horas de descarga de todo el álbum por solo 99 centavos de dólar.
Amazon vendió 300,000 copias y repitió la oferta el jueves asegurando otras 200,000. Mientras tanto, iTunes señaló que en el primer día colocó 104,000 copias, superando el récord de Taylor Swfit.
Born this way también se ha vendido a buen ritmo en Target, Starbucks y Best Buy, cadenas con presencia en todo el país.
Algo semejante no se veía desde los tiempos del desaparecido Michael Jackson, quien fue el único que podía desatar pasiones a ese nivel. Como dirían algunos, “a rey muerto, rey puesto”.