Corría el minuto 92 del encuentro y Juan Aurich tuvo un tiro de esquina a su favor. Subieron todos, incluso el portero Diego Penny. Centró Ciciliano y el balón sobró a Libman. Tejada cabeceó, su remate chocó en el palo y luego todos gritaron gol.
Los chiclayanos festejaban, pero Georges Buckley, árbitro del encuentro, señaló que la pelota no había ingresado. Aurich reclamó, pero el juez siguió firme en su decisión. Las repeticiones mostraron que el balón no llegó a entrar.