Grupo de Gestión de Ideas y Emprendimientos

Aunque los beneficios de formar un grupo con gente de otras áreas de experiencia pueden no ser obvios al principio, la verdad es que todos tendemos a estancarnos en nuestra propia área, haciendo las cosas de la misma manera que los demás. Pero cuando te reúnes con gente de diferentes profesiones y negocios, obtienes muchas perspectivas diferentes sobre el mismo tema.

Henry Ford era un experto en líneas de ensamblaje, Thomas Edison era un inventor, Harvey Firestone era un genio en el manejo corporativo; así que su grupo reunía diversos talentos que aportaba perspectivas diferentes a cada uno de sus retos, ya fueran legales, financieros o relacionales.

Más allá de las posibles diferencias en cada grupo, cada uno tiene diferentes perspectivas, experiencias de vida, habilidades y su red de conocidos, con las que el grupo entero se beneficia, reuniéndose regularmente con el especial propósito de ayudarse mutuamente a alcanzar sus metas individuales y corporativas, y contribuir de manera transitiva al bienestar de toda la humanidad.

Algunos grupos de Gestión de Ideas han ayudado a sus miembros a comenzar o salvar negocios, cambiar de trabajo, llegar a multimillonarios, convertirse en mejores padres, crecer como maestros, mejores partidarios para un cambio social, asistir al medioambiente y mucho más.

CUAL ES EL TAMAÑO IDEAL PARA UN GRUPO DE GESTION DE IDEAS?

El tamaño ideal es de 5 a 7 personas. Si es más chico, pierde su dinamismo. Si es muy grande, se vuelve inmanejable (las reuniones llevan más tiempo, las necesidades de algunos quedan sin atender, y el compartir personal se minimiza). Sin embargo hay grupos de hasta 12 integrantes que se reúnen durante un día entero cada mes y operan de manera exitosa.

CONDUCIENDO UNA REUNION DE GESTION DE IDEAS

Es importante enfatizar que debe respetarse lo más posible la estructura durante la conducción de las reuniones para evitar convertirse en otro Club Social Gastronómico más.

Las reuniones del grupo De Gestión de Ideas deben realizarse una vez por semana o quincenalmente, con la asistencia de todos los integrantes del grupo. Una duración de entre 1 y 2 horas es lo ideal en lo referente a tiempo.

Para las primeras reuniones, es recomendable que cada miembro disponga de una cantidad de tiempo suficiente para familiarizar a los otros con su situación, oportunidades, necesidades, y retos; mientras que los otros miembros realizan un brainstorm sobre las formas en que pueden apoyar a esa persona.

Más adelante, transcurridas unas cuantas reuniones, cada participante dispondrá de una porción del tiempo para poner al tanto a los otros, pedir ayuda y feedback.

Cada reunión deberá seguir esta estructura para asegurar que cada participante reciba la debida atención y continúe involucrado en el grupo. También se deberá asignar a un miembro para que lleve la cuenta del tiempo (puede ser siempre la misma persona o turnarse en cada reunión) para asegurarse de que cada miembro se atenga a la cantidad de tiempo preestablecida para hablar y recibir atención.

Paso 1: Compartir las buenas noticias

Una buena forma de favorecer la unión de los integrantes del grupo y mantener siempre una animosidad alta es compartir alguna historia exitosa, Aún pequeños logros alcanzados desde la última reunión les da a los otros en el grupo el sentimiento de que el proceso funciona y que es bueno continuar involucrados.

Paso 2: Negociar el tiempo

Aunque el fraccionamiento usual del tiempo es de entre 10 a 15 minutos por persona, puede haber ocasiones en que algún participante necesite tiempo extra durante esa sesión en particular para discutir una situación especialmente difícil. En ese caso, pueden solicitar la cantidad de tiempo extra que piensan que pueden llegar a necesitar. Otros en el grupo pueden tener sus propios retos especiales ese día y necesitar tiempo extra también; mientras que algunos pueden decidir ceder completamente su tiempo por no tener nada en especial para decir.

Usando al encargado de controlar el tiempo como mediador, cada miembro negociará la cantidad de tiempo que cree necesitar.

Una vez que el proceso de negociación termina y cada integrante está de acuerdo con el horario, la reunión comienza; con el encargado del tiempo asegurándose de que cada miembro esté en su tiempo y en tema, ya que algunos (los de tipo “dominante” o “necesitante”) pueden monopolizar la reunión o convertir su respuesta brainstorm en un discurso personal. Si otros miembros no satisfacen sus necesidades, el grupo corre el riesgo de perder participantes.

Paso 3: Cada miembro habla mientras el grupo escucha y realiza brainstorm para encontrar soluciones

Qué clase de discusiones podemos encontrar durante una reunión De Gestión de Ideas? “necesito contactos…”, “necesito alguna referencia…”, “estoy perdido en este nuevo aspecto de mi trabajo…” “necesito un experto que me ayude a desarrollar esta idea…”, “necesito juntar $40.000…”, “necesito consejo sobre cómo manejar el servicio al cliente…”

Después del tiempo establecido para la explicación, discusión y brainstorming, el encargado del tiempo dice: “terminó el tiempo” y el grupo cambia su atención a las necesidades del siguiente integrante.

Las discusiones pueden ser personales o profesionales, no tiene importancia. Mientras que todos los miembros obtengan algo de valor de ellas, permanecerán involucrados.

Mientras des algo de valor, todos los otros miembros querrán que estés allí.

Vas a encontrar que los grupos tienden a pasar por etapas. Suelen comenzar discutiendo estrictamente negocios, pero en tanto comienzan a conocerse y a involucrarse en temas más personales como “mi esposa y yo estamos teniendo problemas” o “he perdido mi trabajo”, o “creo que mi hijo consume drogas”; comienzan a crear un vínculo más personal. Pueden utilizar el grupo de la manera que mejor les parezca.

Paso 4: Tomar compromisos que exijan lo mejor de nosotros

Una vez que los miembros hayan tenido su tiempo para exponer, discutir, brainstorm y obtener feedback, el encargado del tiempo pide a cada miembro por turnos que se comprometan verbalmente a una acción inmediata que los impulse hacia delante hacia el cumplimiento de ese objetivo planteado (algo que dicho miembro acepta cumplir antes de la próxima reunión). Este compromiso deberá ser un verdadero reto para él.

Puede ser el resultado de lo que este miembro escucho del grupo esa reunión, “muy bien, voy a hacer tres llamadas para contratar un nuevo vendedor…”, o “voy a llamar a Tal y ofrecerle mis servicios para su empresa…”

Este compromiso asegura que cada miembro esté continuamente moviéndose en la dirección al cumplimiento de sus objetivos, lo cual es el mayor beneficio del grupo De Gestión de Ideas.

“elije tus metas y objetivos no por el mero hecho de poder obtenerlas, sino que para alcanzarlas debas convertirte en una persona mejor y más grande, alguien en quién valga la pena convertirse”

Paso 5: Concluir con un momento de gratitud

Las reuniones pueden terminar con una expresión grupal de gratitud, en la forma en que surja. O se puede ir alrededor de la mesa con cada miembro diciendo lo que más aprecia de los otros… Esto es muy importante tanto para uno mismo como para los demás integrantes del equipo.

Paso 6: Responder al grupo por cada compromiso asumido

Cuando el grupo se reúne cada semana, cada miembro comparte algo relacionado con la meta que se fijó en la reunión anterior. Tomó acción cada integrante? Alcanzó los objetivos planteados?

Encontrarás que uno de las mayores ventajas de un grupo De Gestión de Ideas es el factor de compromiso (otros miembros confrontándote para asegurarse de que cumplas con los compromisos que estableciste). La gente es mucho más productiva cuando se fija un plazo determinado y debe “rendir cuentas” por ello. La realidad es que si sabes que la próxima semana se te va a preguntar sobre el compromiso que estás asumiendo hoy, tomarás las acciones necesarias para cumplirlo antes de ese día. Es una buena forma de asegurarse de alcanzar mucho más.