Lo que genera la posible eliminación del hábitat de las plantas acuáticas es la contaminación de las aguas, la sobreexplotación de especies y productos marinos, así como las construcciones de cemento y fierro en las costas.
Las decisiones políticas tienen mucho que ver en esto pues hay partidos que defienden la Ecología y otros que apuestan por un desarrollo vertical de la economía.
Esto quiere decir que construir edificios de más de cien metros de altura es el sueño de llegar al cielo maltratando a la tierra.