El sueco Zlatan Ibrahimovic es de aquellos jugadores que siempre da que hablar ya sea por sus golazos o por estar metido en problemas.
Esta vez, el atacante del Paris Saint Germain fue captado discutiendo con el cuarto árbitro en un partido de la liga francesa.
El problema se originó cuando Zlatan se acercó a la banda para beber un poco de agua. Entonces, el cuarto árbitro intentó quitarle la botella, generando la reacción del sueco que miró con cara de pocos amigos al juez para luego increparlo.
Finalmente el problema no llegó a mayores y el delantero terminó anotando dos goles para el PSG en el triunfo ante el Troyes.