Planificación financiera

Cuando el empresario se vincula a un mercado y su producto o servicio se desarrolla y fortalece con miras a un posicionamiento local, nacional o internacional, los recursos prioritarios se orientan a fortalecer, expandir y proyectar el negocio. Para esta etapa de crecimiento es necesario contar con fuentes alternas de financiamiento que no sean muy caras, que sean eficientes y que estén disponibles para sostener altas tasas de crecimiento de las empresas.

Algunas de las fuentes tradicionales son los bancos para créditos empresariales a empresas que cumplan estrictos criterios de selección. Sin embargo, hay fuentes alternativas poco conocidas pero muy eficientes como son las empresas de arrendamiento financiero (leasing) para la renta de equipo, las empresas de factoring, para descontar las cuentas por cobrar con clientes clave, y finalmente los proveedores de los principales insumos que necesitamos para nuestra producción que ofrecen 30, 60, 90 o más días de crédito. Generalmente para obtener recursos de estas fuentes de financiamiento solo se requiere una buena empresa, buenas referencias, buen equipo en la dirección de la empresa y, sobre todo, buenas proyecciones a futuro.

Es fundamental que los emprendedores entiendan cuáles son las etapas por las que pasará su negocio, para poder proyectar sus ventas, y deben identificar cuáles son las fuentes de financiamiento para cada etapa. Al iniciar operaciones, la mejor recomendación es no perder el tiempo buscando dinero en efectivo. Más bien se debe pasar el tiempo vendiendo y buscando financiamiento directo de los proveedores, cumpliendo los plazos otorgados, para mantener estos créditos directos. Una vez que la empresa esté estable y con cierto crecimiento, se puede empezar a buscar recursos en efectivo con bancos y otros proveedores de financiamiento (Con información del diario La República).