Como era de esperar, la escuadra dirigida por Vicente del Bosque derrotó por un abultado, pero abultado score, al modesto combinado nacional de Tahití, cuyo portero Mikael Roche vio ingresar 10 veces el balón en su portería.
De esta manera la selección ibérica avanzó a las semifinales del torneo. Esto gracias a los 4 tantos de Fernando Torres, a los 5, 33, 57 y 78 minutos respectivamente, y a los 3 goles de David Villa que se reencontró esta tarde con el gol a los 39’, 49’ y 64’. Y a los dos de David Silva, a los 31’ y 89’, y al solitario gol de Juan Mata a los 66 minutos.
En verdad, lo que quedó claro es que el encuentro arbitrado por el argelino Djamel Haimoudi fue un duelo desigual, pues se trató de un enfrentamiento entre profesionales, los españoles que como selección volvían a jugar después de 63 años en el mítico estadio Maracaná, y una escuadra que probablemente lleve como pasivo más de una veintena de goles.