Jueves 25 de abril 2024 | Contáctenos
Con la asignación de una partida especial para infraestructura vial y peatonal en el caserío Cascajales de Ciudad Eten, dicha zona se perfila como un importante destino turístico para la región Lambayeque, considerando su importancia por ubicarse a unos 500 metros de la Huaca Sinán o Huaca EL Taco y el descubrimiento –en el 2005-- de un cementerio Muchick que perteneció a la cultura Lambayeque, de más de mil años de antigüedad.
El alcalde de Ciudad Eten, Germán Puican Zarpán, informó que mediante Ley Nº 30281, Ley de Presupuesto del Sector Público para el Año Fiscal 2015, se aprobó, entre otros, el presupuesto institucional del pliego 012: Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo. Entre los proyectos aprobados, figura el presentado en agosto por la Municipalidad distrital de Ciudad Eten: “Creación de la infraestructura vial y peatonal en el caserío Cascajales” por un monto de 723,571 nuevos soles.
Al iniciar este año –refirió el burgomaestre—esta gestión no encontró proyectos y además el municipio estaba inhabilitado para participar en el programa “Trabaja Perú” debido que no se cumplió con un convenio y se tenía que devolver 50 mil soles. “Mientras Monsefú y Reque se beneficiaban, Ciudad Eten tuvo que gestionar su habilitación y así se ha logrado la obra en Cascajales. Esperamos la transferencia del recurso para luego iniciar la transformación de Cascajales. Sumados los proyectos de defensas ribereñas y la carretera Eten a Villa, dicha zona se perfila como un sitio turístico ya que cuenta con los restos arqueológicos de la Huaca del Taco y el cementerio de Los Degollados", precisó Puican Zarpán, quien además informó que en la quincena de diciembre se firmará el convenio respectivo.
El descubrimiento del referido cementerio de Los Degollados ocurrió los primeros días del mes de febrero del 2005 y de manera fortuita. El hecho de haber encontrado las cervicales con cortes, aparentemente hechas con un cuchillo ritual, apuntó a que los sacrificios hechos en Cascajales se realizaron en ceremonias especiales de carácter religioso. En esta intervención la ofrenda humana fue la más importante y habría sido hecha a la Diosa de La Luna, versión que se argumenta por su orientación de este a oeste y su cercanía a la desaparecida Huaca Sinán, palabra muchick cuya traducción significa Templo de la Luna.
Además se encontraron restos de camélidos, probablemente llamas, pescado, maíz, cerámicas, objetos de cobres (agujas y pinzas), collares de chaquiras con algunas cuantas de turquesa, que se utilizaron en vida como símbolo de estatus social. Los cadáveres estaban dispuestos con la cabeza hacia el sur y los pies hacia el norte, a 80 centímetros bajo tierra, así como otros que están a 10 centímetros.
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