Hace aproximadamente un mes gran parte del país sufrió por el desabastecimiento de agua a causa de los desbordes y fenómenos del Niño Costero, entrando en una verdadera reflexión de la importancia de su cuidado para contar con ella en el presente y futuro.
Por ello, siendo éste uno de los principales recursos de la tierra, de uso diario y constante en nuestras vidas, especialistas de Netafim, líder global en soluciones inteligentes de irrigación para un futuro sostenible, recuerdan y recomiendan cuatro métodos que se puede poner en práctica para optimizar y racionalizar adecuadamente el uso del agua:
? Al regar jardines: Si en casa se tiene un pequeño jardín, siempre que sea posible, realizar la limpieza de las superficies utilizando cubetas y esponjas en lugar de la manguera abierta. Incluso, se puede considerar crear una regadora artesanal con una botella de plástico y creando agujeros en la chapa. Se puede incluir medidas con un plumón indeleble para separar por centímetros la cantidad del líquido que se destinará a cada planta o espacio.
En el caso de los jardines públicos, se requiere diseñar fórmulas que no desperdicien el agua por montones. Por ejemplo, se recomienda la instalación de tecnologías como la del ‘Riego por goteo’ donde el agua es aplicada directamente a la zona de la raíz de la planta. Una de sus principales ventajas es su circuito que permite la distribución frecuente y precisa de pequeñas cantidades de agua y nutrientes, que van directamente a la planta, ya sea de manera subterránea o externa. Esto optimiza las condiciones de humedad y areación, Así se disminuirá el uso del agua aplicado y se incrementará su rendimiento.
? En viveros: si se decidió emprender en un negocio como éste debes saber que existen soluciones que maximizan la producción de los cultivos, su calidad y que minimizan el uso de agua y fertilizantes a través de sistemas hidráulicos. Además existen estructuras que optimizan el consumo de energía, reducen el costo laboral y aumentan la rentabilidad del negocio.
? En las griferías: al usar las griferías para lavarse los dientes, las manos o cara no se debe dejar el grifo abierto; mucho menos si entretenerse frente al espejo por las mañanas. En caso se esté lavando los menajes, procura limpiar las vajillas en grupo con las lavazas y al enjuagarlas abrir el grifo en el menor nivel de presión, de modo que no se desperdicie, ni se deje pasar el agua de manera libre en grandes cantidades.
? En tus alimentos: al lavar las verduras, frutas o cualquier otro alimento, utiliza un depósito donde pueda caer el agua y depositarse. De esta manera, podrás reusar esa agua para el riego de tus plantas. Puedes hacer lo mismo con el agua con el que sancochas tus vegetales, pastas, frutas, cereales como la quinua o huevos.