La Artritis Reumatoide (AR) es una enfermedad del sistema inmunológico que se caracteriza por presentar dolor, deformidad, inflamación y limitación funcional de las articulaciones, especialmente en las pequeñas articulaciones de las manos y con menor frecuencia en los miembros inferiores.
Se calcula que en el Perú la prevalencia de la enfermedad es de 0.51%[1]. La artritis reumatoide es una de las causas más comunes de discapacidad: tras 12 años de evolución, el 80% de las personas que la padecen tiene discapacidad parcial y el 16% discapacidad total.
Causas de la enfermedad
La AR es una enfermedad generalizada, crónica, autoinmune y de origen desconocido. De acuerdo con la Liga Internacional de Asociaciones de Reumatología, sumado a los factores de riesgo, genéticos y ambientales, se han identificado otros aspectos influyentes en la aparición de la enfermedad tales como exposición al tabaco, alcohol, infecciones y obesidad.[2]
Cuando aparece esta enfermedad, las células del sistema inmunológico invaden los tejidos de las articulaciones y provocan inflamación que ataca la articulación, destruyen su arquitectura, dando lugar a la deformidad y limitación del movimiento. Este proceso crónico conduce a la destrucción progresiva de las articulaciones comprometidas, generando incapacidad funcional, y si en el transcurso del tiempo, no se trata adecuadamente, puede producir una limitación permanente con el deterioro por consiguiente de la calidad de vida.
Los pacientes con artritis reumatoide ya diagnosticada, no sólo sufren consecuencias físicas, sino que también pueden verse afectados psicológicamente con enfermedades como depresión y desequilibrio emocional; así como la reducción en sus ingresos personales y familiares por su incapacidad laboral.
Impacto social y económico
Los costos directos e indirectos se deben considerar en la atención de pacientes con artritis reumatoide: dentro de los costos directos se encuentran: tratamientos, hospitalización, citas médicas, intervenciones terapéuticas, equipos médicos, fisioterapia, personal médico, entre otros. Con respecto a los costos indirectos, se estima que la incapacidad para laborar aparece luego de 5 a 10 años del inicio de la enfermedad y oscila entre el 43% y 50% en diferentes países[3].
Viviendo con artritis reumatoide
De acuerdo a la liga Internacional de Asociaciones de Reumatología, se deben tener presentes cinco aspectos fundamentales para el manejo adecuado de la enfermedad:
[1] Fuente: Estudio Copcord- Hospital Almenara.
[2] Revista Reumatología Clínica de la Liga Internacional de Asociaciones de Reumatología. Carga de la enfermedad, artritis reumatoide en América Latina: una perspectiva regional. 2015; 34 (Suppl 1): 9-15.doi: 10.1007/s10067-015-3012-0.
[4] Sheely C, Murphy, Barry M. Depression in rheumatoid arthitis-under-scoring the problem. Rheumatology 2019; 45:1225-7