Según la última edición de La guía verde de electrónicos elaborada por Greenpeace EEUU, Fairphone y Apple le llevan la delantera a empresas como Samsung, Huawei y Amazon ya que estas últimas son incapaces de responsabilizarse de su huella medioambiental.
Greenpeace EEUU ha evaluado a 17 de las principales empresas tecnológicas del mundo según su nivel de transparencia, rendimiento e iniciativa en tres áreas clave para encaminar este sector hacia la sostenibilidad: reducción de emisiones mediante energías renovables, uso de materiales reciclados y eliminación de sustancias químicas peligrosas.
"Las empresas tecnológicas aseguran ser las más innovadoras, pero sus cadenas de suministro siguen ancladas en la Revolución Industrial. Sabemos que pueden cambiar. En vez de seguir fomentando el cambio climático, las empresas tecnológicas deben liderar el cambio, así lo han hecho ya algunas como Google y Apple, cuyos centros de datos funcionan con renovables", ha declarado Julio Barea, portavoz de Greenpeace España.
Dell y HP siguen a Apple y Fairphone en el ranking con un bien alto (C+); Samsung, Huawei, Amazon y otras ocho empresas obtienen un aprobado (D) o suspenso (F).
A pesar de la posición primordial que ocupa Samsung, al ser el mayor fabricante de smartphones y uno de los mayores proveedores de pantallas, su sistema de fabricación depende enormemente de los combustibles fósiles. En 2016 la empresa empleó más de 16.000 GWh de los cuales solo un 1% procedía de energía renovable.
A continuación se enumeran algunas de las conclusiones principales:
Entre 2006 y 2012 Greenpeace publicó la guía con regularidad y, como resultado, las empresas progresaron de forma constante en la eliminación de los materiales peligrosos y en la fabricación de unos aparatos más eficientes energéticamente.
"Es obvio que el impacto del modelo de negocios lineal extraer-fabricar-desechar de los fabricantes de aparatos va más allá de los residuos electrónicos. Para solventar los impactos medioambientales que generan sus enormes cadenas de suministro las empresas deben tener más ambición, más transparencia y más consecución. El modelo actual es insostenible", añadió Barea
Greenpeace solicita al sector tecnológico que se responsabilice del rápido crecimiento de su huella y sus efectos sobre el planeta: