Francia y Uruguay crearon la misma cantidad de oportunidades de juego abierto, pero la portería y el set fueron la diferencia. En un extremo, Hugo Lloris estaba inmaculado. Por otro lado, Fernando Muslera cometió un gran error. Uruguay tampoco es muy bueno en el juego desde atrás, y parecía un poco aturdido después del primer partido de Raphael Varane.
Los fanáticos se quedarán preguntándose qué podría haber pasado si Edinson Cavani estuviera en condiciones de jugar. Uruguay ha sido altamente dependiente de Suarez y Cavani para crear goles por sí mismos en este torneo. El reemplazante de Cavani, Cristhian Stuani, no dio mucho alivio.
Francia ahora espera al ganador de Bélgica-Brasil, que debería darles la prueba más dura que hayan enfrentado en este torneo. Argentina y Uruguay no fueron meritorios, pero es probable que sea mucho más difícil.