Río de Janeiro.- No es un adiós definitivo, sino un hasta luego. El que es quizá el estadio más famoso del mundo, el Maracaná, cerró sus puestas oficialmente para una exhaustiva remodelación que deberá culminar en tres años.
Según informaron las autoridades de Río de Janeiro, el coloso será remodelado de cara a la Copa Confederaciones del 2013 y el Mundial de Fútbol del 2014, con una inversión de US$391 millones.
El Maracaná fue el mayor estadio del mundo y acogió la final del Mundial de 1950 con más de 150,000 espectadores en sus tribunas, pero su reforma reducirá las plazas de las actuales 88,000 a 83,000.
El partido entre el Fluminese y el Guaraní (2-1) que se jugó el domingo por el campeonato brasileño fue su último gran show.