Una ballena de 15 metros y 40 toneladas de peso que permanece encallada en una playa del sur de Brasil desde el pasado martes ha sobrevivido a la eutanasia a la que fue sometida para aliviar su sufrimiento, informó hoy una portavoz del equipo de especialistas que la trata.
El animal fue sometido anoche a un proceso de eutanasia con una dosis superior a lo normal debido al tamaño del cetáceo, según la bióloga y directora de Proyecto Ballena Blanca, Karina Groch.
Sin embargo, a pesar de que los expertos esperaban su muerte 40 minutos después de inyectar la dosis, el animal continúa respirando.