Londres.- Quizá después de todo no solo es un problema de actitud, sino también de genética. Un grupo de científicos británicos descubrió un gen que hace que la gente se embriague más rápido que los demás y que es clave para entender la enfermedad del alcoholismo.
Se trata del gen CYP2E1 que está presente en el 20% de las personas, es decir, una de cada cinco que tiene menos tolerancia al alcohol y que suelen llamarse “cabezas de pollo”.
Los científicos investigaron la historia genética de alrededor de 230 estudiantes universitarios que tenían un padre alcohólico, pero no eran alcohólicos.
Los estudiantes recibieron dosis de alcohol equivalente a tres tragos de tamaño medio. Su estado mental se evaluó a continuación, a intervalos regulares. Las pruebas demostraron que existía una relación entre los efectos del alcohol y la presencia del gen CYP2E1.
El autor del estudio, el profesor Kirk Wilhelmsen, señaló que pese a los resultados todavía queda mucho por aprender del alcoholismo que es una de las enfermedades más complejas del mundo.