El estadounidense Randall Bailey no soportó que el marroquí Said Quali manejara el tren de pelea y lo arrojó inexplicablemente fuera del ring. Ambos boxeadores se declararon ganadores, al final.
Quali no pudo continuar debido a una seria lesión en el cuello. Naturalmente, la pelea por la posibilidad de competir por el título welter de la Federación Internacional de Boxeo fue suspendida.