Madrid.- El club deportivo Barcelona consideró como injusta y desproporcionada la sanción a la que fue sometido Lionel Messi por celebrar un gol levantándose la camiseta oficial y mostrando otra en la que se leyó: “Feliz cumple, mami”.
El comité de competición, dependiente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), informó ayer que el jugador argentino será sancionado con 2,000 euros y una tarjeta amarrilla y pese a que el árbitro del encuentro ante el Racing no le había amonestado.
El Barcelona señaló el mensaje de Messi no era ofensivo ni respondía a motivos publicitarios, razones por las que se prohíbe a los jugadores la exhibición de textos.
Por el contrario, el equipo azulgrana destacó que con su actuación Messi sólo quiso potenciar “valores sociales como el amor a la familia” por lo que interpuso un recurso de apelación.