Algunos han llegado a calificar al ejercicio como "la pastillita milagrosa" por sus incontables beneficios para el ser humano.
A continuación conozca las diez enfermedades más comunes que reducen su impacto o son erradicadas a través de la práctica regular del ejercicio.
1. Obesidad y sobrepeso: El ejercicio incrementa el gasto energético o energía consumida durante su práctica, participando en el aumento y la utilización de sustratos energéticos, disminuyendo los depósitos de grasa a nivel subcutáneo.
2. La Hipertensión: La denominada enfermedad silenciosa, reduce su efecto gracias a la disminución de las cifras tensionales posterior a la práctica del ejercicio. Para lograrlo se modifica la resistencia vascular periférica del plan de ejercicios de manera periódica.
3. La diabetes o tolerancia a los carbohidratos: La práctica regular de entrenamiento da mayor afinidad a los carbohidratos sanguíneos y aumenta la sensibilidad de la insulina generando mayor utilización de la glucosa, lo que significa la disminución y control del azúcar sanguíneo.
4. La enfermedad cardiovascular: El buen desarrollo de un plan de ejercicios previene la aparición y evolución de la enfermedad del sistema cardiovascular: cerebrovascular, coronaria (AIAM, angina o insuficiencia cardiaca) y enfermedad arterial periférica, además de promover el adecuado ritmo del corazón, disminuyendo la aparición de arritmias cardiacas.
5. La osteoporosis: El aumento de las fuerzas sobre el hueso mediante el ejercicio estimula la formación de nuevo hueso, aumenta la densidad ósea; es decir, aumenta la concentración de calcio en los huesos y disminuye la pérdida de éste a través de la edad y periodo postmenopáusico. De esta forma reduce la aparición de fracturas en personas de cualquier edad.
6. El cáncer: A través de numerosos estudios se ha evidenciado que la práctica regular de actividad física disminuye la incidencia de cáncer de seno, próstata, endometrio, ovario y colon, secundario a la modulación de la respuesta inmune y estimulación hormonal con el ejercicio.
7. La Dislipidemia o alteración o alteración de los lípidos sanguíneos: La práctica del ejercicio participa disminuyendo el colesterol total, el colesterol malo o LDL y los triglicéridos causantes de la ateroesclerosis. Así como aumenta el colesterol bueno o HDL que contribuye en la disminución de las grasas.
8. Artritis, Artrosis y otras enfermedades articulares: Mediante el ejercicio es posible desarrollar programas para disminuir el dolor; mejorar la movilidad y la fuerza de las articulaciones corporales. También reduce la discapacidad de personas con enfermedades que comprometen su desempeño físico y mejora su calidad de vida.
9. Alteración del Estado Anímico: El ejercicio libera endorfinas estimulando la gratificación o sensación de plenitud, de forma que controla cualquier disminución del estado anímico y puede utilizarse en el manejo coadyuvante de los trastornos mentales.
10. Control del Tabaquismo: Las personas que realizan actividad física regularmente controlan de forma más fácil la ansiedad secundaria a la suspensión del cigarrillo.