Un grupo de investigadores de la Universidad de Concordia (Canadá) descubrió que la ínsula y el núcleo estriado son las partes del cerebro que hacen que los seres humanos se enamoren y sientan deseo sexual.
Cabe indicar que ambas partes aunque están vinculadas se encuentran separadas.
Asimismo, la investigación contó con el apoyo de neurocientíficos pertenecientes a las Universidades de Syracusa (Nueva York) y Virginia Occidental (Estados Unidos), así como la Universidad de Ginebra (Suiza) donde se analizaron un total de 20 estudios que presentan la función del cerebro respecto al amor y al deseo sexual.
Finalmente, los científicos descubrieron que la zona del núcleo estriado, el mismo que genera el deseo sexual tiene relación con la adicción a las drogas.