En su primera semana en el mercado, el iPhone 5, la nueva versión del teléfono inteligente de Apple, vendería 10 millones de modelos en los diversos países en los que se ofertará, de acuerdo a una investigación de Gene Munster, el grupo analista Piper Jaffray.
De hecho, la firma calcula que antes que acabe el presente año, la empresa de Cupertino habrá facturado 28 millones de unidades, cuya presentación será mañana en la ciudad de San Francisco, Estados Unidos.
Por ello, no es raro pensar que el iPhone 5 podría mejorar el éxito de su antecesor 3GS, que vendió un millón de terminales en solo siete días, aunque el del 4S fue de más de 4 millones.