Un grupo de científicos descubría un meteorito de 18 kilogramos de peso en la región oriental de la Antártida, cerca de estación científica Princess Elisabeth.
La roca ha resultado un hallazgo muy inesperado no solo debido a su peso, sino a que no suelen encontrarse objetos celestes tan grandes en el lugar.
Por su parte, Vinciane Debaille, geólogo de la Universidad Libre de Bruselas, destacó que el meteorito representa un descubrimiento “muy especial”, ya que es el mayor encontrado en la región en los últimos 25 años, y subrayó la importancia de su estudio para comprender mejor cómo se formó y se desarrolló el sistema solar y cómo la Tierra se convirtió en un planeta único.
El análisis inicial realizado por los científicos sugiere que el enorme meteorito es una condrita ordinaria, el tipo más abundante de meteorito. Su estado erosionado permitió a los científicos inspeccionar la parte interior. El meteorito se encuentra actualmente en un proceso de descongelación especial en Japón para asegurar que el agua no llegue dentro de la roca, pero será llevado a Bélgica para realizar más análisis.