Sucedió en el mes de octubre de 2015 en Chicago, EE.UU., durante un congreso de neurólogos con un objeto de estudio en común: el impacto de los videojuegos en la salud cerebral. Luego de discusiones y presentaciones, el congreso, realizado por la Sociedad Americana de Neurología, terminó con un voto a favor para los que juegan regularmente. Te presentamos algunos de los principales efectos positivos de este tipo de entretenimiento para el cerebro.
Resolver rompecabezas
El mismo problema puede tener múltiples soluciones y varias salidas diferentes. El cerebro de quien juega más de 20 horas semanales mostró ser más capaz de trazar estrategias complejas, partiendo de una serie de pistas, lo que puede denotar habilidades probabilísticas más desarrolladas en la resolución de una prueba. Las personas que no juegan se quedan atadas a una única pista y no tienen el mismo tipo de activaciones en las zonas cerebrales responsables de la memoria y aprendizaje, como el hipocampo y la corteza frontal.
Mejora la cognición
Pocas personas tienen el privilegio de nacer y crecer en ambientes estimulantes. Los juegos, sin embargo, ayudan a hacer más accesibles experiencias llenas de estímulos, como, por ejemplo, escenarios de otro mundo, espacios enormes, ciudades alternativas y seres con habilidades sobrenaturales. Este tipo de experiencias presentes en los videojuegos estimulan el hipocampo, lo que ayuda a evitar pérdidas cognitivas debido a factores como la edad.
Aumento de la capacidad de memoria
Regularmente los que juegan tienen más facilidad para guardar informaciones. La buena noticia, de acuerdo con lo que los científicos estipulan, es que aún las personas que no han jugado videojuegos en su vida solamente necesitan comenzar a hacerlo para beneficiarse de la ganancia en la memoria a corto plazo. Los juegos utilizados en estas pruebas fueron Super Mario 3D World y Angry Birds. Lo curioso es que el grupo que jugó Super Mario fue el que presentó mejorías, mientras que el grupo que jugó Angry Birds mantuvo el mismo desempeño que el grupo control, aquellos que nunca juegan. La explicación para esto es que el mundo tridimensional (3D) de Super Mario ayuda a estimular el hipocampo de una forma en la cual el mundo bidimensional (2D) no consigue.
Así que continúa jugando, ¡tu cerebro te lo agradecerá!