Esta octava edición ha sido un nuevo evento de Olas Perú y de Roberto Meza, en su constante búsqueda de apoyar y rescatar a las futuras promesas del surf peruano.
El distrito de Barranca albergó durante el fin de semana a un grupo de jóvenes y niños en compañía de sus padres y hermanos, con el objetivo de seguir de cerca las relaciones de los pequeños con sus familiares.