La Habana.- La crisis económica le está pasando la factura a Cuba, que con un sistema político y económico socialista ha sido incapaz de frenar la escasez de alimentos, medicinas y una gradual degeneración financiera de la población.
Para frenar que la situación termine por estallar el gobierno de los hermanos Castro anunció una serie de reformas que incluye entre otras cosas la liquidación judicial o la privatización de empresas estatales que se muestren deficitarias.
“Las empresas, que ya no sean rentables o tengan pérdidas sistemáticas, serán sometidas a un proceso de liquidación judicial o podrán transformarse en entidades de gestión no estatal (privada, cooperativa o mixta)”, explicó el régimen que publicó hoy una serie de reformas económicas que entrará en vigor inmediatamente.
Se trata de 313 medidas que buscan dinamizar la economía nacional, en crisis desde hace varios años.