Con la aprobación de 15 países, el gobierno boliviano logró el apoyo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para obtener su salida al mar por Chile.
Esta resolución permite que el canciller boliviano Choquehuanca ofrezca en El Salvador, una queja contra el Estado chileno por incumplir la resolución de 1979 de la OEA, sobre la demanda marítima de su país.
De acuerdo a Andina, esta denuncia sería apoyada en Centroamérica por las siguientes naciones: Venezuela, Paraguay, Ecuador, El Salvador, Panamá, Colombia, Perú, Argentina, Uruguay, Brasil, Nicaragua, Antigua y Barbuda, Dominica y San Vicente y las Granadinas.