Uno de los retos que deberá enfrentar quien se convierta en el sucesor de Alan García Pérez en el sillón presidencial, es -entre otros- sortear la polarización existente con gestos políticos nítidos.
"Hay que cambiar el estilo de gobierno y tratar de integrar a ambos sectores: el incluido y el excluido (...) No basta con inaugurar obras y carreteras. El contacto directo con la gente tiene que recuperarse", afirmó en tal sentido el analista político Carlos Mélendez en declaraciones que recoge la revista Somos.
Otro reto es -sin duda- mantener una economía con una de las tasas de crecimiento más altas de la región y disminuir la pobreza en la que vive un tercio de la población.