Ochenta y cinco supuestos terroristas de Al Qaeda se encuentran ante los tribunales en un megaproceso contra la organización terrorista que se lleva a cabo en Arabia Saudí.
Trece de ellos están acusados de participar en los atentados con bomba contra tres complejos de viviendas para extranjeros el 12 de mayo de 2003 en Riad, en el que murieron 31 personas de diversos países.
Al resto de los acusados la fiscalía estatal les atribuye formar parte de Al Qaeda, así como planear y llevar a cabo otros atentados, en parte frustrados y en parte realizados.