Según aseguró el padre de la intérprete de "Rehab", Mitch Winehouse: "Los médicos le habían aconsejado reducirlo gradualmente, pero Amy le contestó que podía hacerlo de esa forma -era todo o nada- su cuerpo no resistió el shock y Amy acabó por fallecer".
Lo ilógico es que Amy Winehouse habría fallecido después de dejar su consumo abusivo de alcohol pero abandonar dicho vicio radicalmente afectó sus salud en lugar de mejorarla. Según reconoció el médico de la artista: "Alguien que pasa tantos años consumiendo algo y de repente deja de hacerlo radicalmente puede quedarse inconsciente, con un fuerte riesgo de dejar de respirar y morir".
Finalmente, Mitch aseguró a "The Sun": "Amy estaba tratando de vencer su batalla contra el alcohol. Ya no bebía hacia tres semanas, y no probó las drogas durante los últimos tres años", informó Europapress.es.