Un joven inglés de apenas 20 años murió de una trombosis venosa profunda, que parece haber sido provocada por jugar videojuegos durante largos períodos, según los médicos que lo atendieron.
"Él vivía para su Xbox (consola de juego). Nunca soñé que estaba en peligro. Como padre, usted piensa que jugar en la computadora no puede hacer ningún daño. Los niños de todo el país que están jugando estos juegos por largos períodos no se dan cuenta que los puede matar”, señaló David Staniforth, padre del menor llamado Chris.
Antes de desmayarse Chris le dijo a un amigo que experimentaba una extraña sensación en el pecho.
Cuando ya era llevado a un hospital en la ciudad de Sheffield, en Inglaterra, se produjo su muerte, sin que los paramédicos pudieran hacer algo para reanimarlo, según informó el diario británico The Sun.