El presidente de la República, Ollanta Humala, llegó a Pisco para iniciar los trabajos de reconstrucción en la zona del terremoto que sacudió el sur del Perú en el 2007 y vivió un momento peculiar con una pobladora local.
Es así que una señora le agarró fuerte el brazo y no lo quiso soltar por unos segundos para que pueda escuchar su pedido.
Ante tal situación, Humala Tasso solamente atinó a decir: "Si no me sueltas mi brazo, no voy a poder hacer nada", dijo el Jefe de Estado entre risas en el marco de su primera actividad fuera de Lima.