El protagonista de "El curioso caso de Benjamin Button" le regala a cada uno de sus seis hijos un poni, pues compró los animales en secreto para su finca familiar en Chateau Miraval, informó una fuente al periódico The Sun.
Brad Pitt "no estaba seguro de si debería hacer la compra porque enseñar a los niños lleva mucho empeño y tiempo, sin embargo lo ha decidido hacer porque cree que vale la pena", informó la fuente.
Finalmente, el mismo informante señaló: "El lugar es enorme. Tienen muchos campos alrededor de la propiedad. La entrada a la casa tiene 4,8 kilómetros de largo y está llena de fuentes impresionantes. Y ahora también tienen una piscina nueva con toboganes", informó Europapress.es.