La ex-esposa de Brad Pitt se ha mudado este verano a Hollywood Hills, un barrio que tilda de ser muy tranquilo pero que ha sufrido un drástico cambio gracias a que la actriz estadounidense se ha instalado allí.
Jennifer Aniston ha desatado un verdadero caos, ya que los paparazzi y el tráfico se ha empezado a sentir en esa zona hollywoodense, y por ello varios vecinos no han tardado en presentar sus quejas.
Ahora, Jen ha tenido que aumentar la presencia policial para deshacerse de los hombres de prensa, quienes le están causando problemas con los vecinos, y así mantener la privacidad y tranquilidad de todo el barrio, informó Europapress.es.