Quizás el comercial no fue visto en varios países sudamericanos, y quizás no sea actual. Sin embargo y fiel a los viernes, Generaccion.com buscó entre los miles de videos colgados en YouTube y halló a un perro ingenioso que se come la hamburguersa y la gaseosa de su amo, sorprendentemente, poniendo en su lugar -con su hocico- a un gato. Vale la pena verlo.