Después que le revocaran su libertad condicional por no cumplir con las ordenanzas de la juez que lleva su caso, por el recordado robo de un valioso collar en una prestigiosa joyería de Venice Beach en California, la actriz pagó US$100 mil de fianza para no pasar sus días en prisión.
Ahora, una fotografía de Lindsay Lohan revela que después de salir de la cárcel y pasar por ese trago amargo, la actriz estadounidense ha decidido darle un giro a su vida y ha empezado por cambiar su apariencia.
La protagonista de "Casi Embarazada" o "Herbie" llegó al salón Andy Lecompte, ubicado en Los Ángeles (California), acompañada por un amigo personas y decidió cambiar su aspecto, informó Labotana.com.