La irresponsabilidad del conductor de un bus interprovincial pudo terminar por ocasionar una terrible tragedia a la altura del kilómetro 42 de la Carretera Central. Los bomberos tuvieron que hacer uso de pesadas herramientas para poder liberar a las personas que quedaron atrapadas dentro del vehículo.
El bus de la empresa Lobato que tenía como destino la ciudad de Oxapampa se terminó por estrellar contra el frontis de una vivienda. Afortunadamente el incidente no reportó ningún muerto pero dejó tres heridos que fueron llevados al hospital de Chosica, donde se vienen recuperando.