Scarlett Johansson se confesó en una entrevista dada a la revista Vanity Fair donde explicó para quien eran las fotos que se tomó desnuda, las cuales fueron robadas y luego publicadas en internet.
La actriz que confesó que esas fotos las tomó ella misma ahora aclara que eran para quien fuera su esposo Ryan Reynolds de hecho ella misma se las mandó, según publica ideal.es.
Scarlett que el pasado mes de septiembre fue víctima de un robo por parte de unos hackers que entraron en su cuenta de correo electrónico y también al cometido de su dispositivo móvil salió a aclarar nuevamente el origen de las tan comentadas fotografías, que ahora ya sabemos eran para su ex Ryan.
El FBI se hizo cargo de la investigación ni bien se hicieron públicas las imágenes de la actriz.