"Ha sido el peor mes de mi vida", aseguró el cantante británico después de haber sido ingresado en un hospital de Viena (Austria) durante 30 días al haber padecido una neumonía y aunque se encuentra aún “muy débil” ha confesado que es “un afortunado por poder contarlo".
George Michael ha afirmado que “soy realmente una persona muy afortunada de poder contarlo y me queda mucho por vivir" y aunque se siente “muy débil” se encuentra “genial” y por ello ha querido agradecer a todos quienes se preocuparon por su salud.
"No quería preocupar a mis fans demasiado y siento mucho no haber podido contactarlos de ninguna manera, pero realmente no podía hacerlo", aseguró a través de su cuenta oficial en Twitter a sus seguidores, informó Europapress.