Al popular actor no le importa tener que engrosar su figura cuando se lo demanda un papel pero reconoce que cuando no está trabajando sus rutinas de ejercicio son muy simples.
"Realmente no trato de mantenerme en forma. Si lo tengo que hacer por una película, ya sea estar en forma o en poca forma, lo haré por el trabajo. Eso es parte del papel. Pero si no, solo me gusta practicar mi swing", contó.
Aunque el pasado de fiestas de Mark será recordado, su vida actual está rodeada de serenidad y disfruta de una tranquila vida familiar en California junto a su mujer Rhea Durham, con la que lleva más de 10 años, y sus cuatro hijos, según publica bangshowbiz.com.
"Me encantaba Nueva York cuando salía hasta las 4 o 5 de la mañana. Pero ahora hay mucha gente ahí apilada una encima de otra. Odio que mis hijos estén en Nueva York. La gente se golpea una contra otra, los taxis vuelan a tu alrededor. Es una locura", contó a la revista Total Film.